lunes, 20 de diciembre de 2010

Hey Yu



Cuando te sientas como un bicho raro, piensa en los Beatles.

Actualmente, ellos son un ícono del rock and roll, pero llegar hasta donde lo hicieron no fue fácil. Nunca lo es. En cualquier biografía, de cualquier persona exitosa, podemos encontrar los mismos tropiezos, errores, intentos fallidos, engaños, desilusiones, y demás. Además, tienen en común el ingrediente secreto: todos han hecho lo que realmente les apasiona. Solo de esa manera, el sueño no les vence, las ganas no se agotan, la ilusión se mantiene intacta y la fuerza se renueva tras cada derrota.

Estos cuatro chicos, vestidos como tontos, con cortes de pelo de tonto, y haciendo bailecitos extraños, lograron acaparar al público inglés. Luego lo hicieron en Alemania, logrando enloquecer –literalmente- a todo aquél que les escuchaba. Y así, como un tsunami, fueron conquistando, con sus caras de tontos, todo el continente europeo.

De pronto, decidieron que era el momento de ir a Estados Unidos. Cuando las discográficas estadounidenses les escucharon no les pareció tan mal. Pero, cuando les vieron… Las discográficas creyeron que era una broma. Pensaron que iban disfrazados. Y durante mucho tiempo, les negaron la posibilidad de entrar al mercado norteamericano. Se burlaron de sus pelos, de sus ropas, de sus bailes, y de todo lo que hacían en escena. Posteriormente, un alma caritativa, sintió pena por aquellos cuatro bichos raros, y decidió hacer la obra de caridad del día, dándoles una oportunidad.

Lo que sucedió después, lo sabemos por nuestros padres. ¡Como bailaron sus canciones! En aquella época se bailaba el rock con estilo –a diferencia de ellos, mi generación no baila el rock, lo salta y sacude la cabeza haciendo cuernitos con los dedos de la mano-. Las cantaban sin saber inglés: “hey yu, don maiquibad…” “leribí, leribí, leribí” “yesterdei…ol mai trobles simsofaruguey”.

Lo mejor de todo era que se las dedicaban entre novios sin saber lo que significaba la letra. -¿Cuántas veces no hemos escuchado la frase de un papa diciendo con cara de Don Juan: “con esa canción enamoré a tu mama?”. Pero no importaba, lo que transmitía en realidad era la música, y no la letra.

A ellos les llamaron locos
A ellos les llamaron raros
A ellos les llamaron tontos con pelo de tonto
A ellos les llamaron tontos que visten como tontos… Y sin embargo, los que quedaron como tontos fueron quienes pronunciaron estas palabras.

De acuerdo a las estadísticas, la media de vida del ser humano en Europa es de 81 años. Las mujeres, vivimos diez años más que los hombres pues nos negamos a abandonar a nuestros hijos en la tierra –sin importar cuantos años tenga el hijo-, lo que arroja la cantidad de 91 años.

Si lo que nos apasiona es hacer empanadas de atún, hagamos empanadas de atún
Si lo que nos apasiona es limpiar cristales, limpiemos cristales
Te asegurará por una parte el éxito, y por la otra 91 años de felicidad.

Cuarenta años después de la disolución de la banda, nació este niño, y ahora canta para ustedes: Hey Jude (o en versión papá-mamá: Hey Yu )

2 comentarios:

virusmusic dijo...

muy bien Gaba... muy bien hecho!

Anónimo dijo...

excelente!!!

....tu fan negro!